Su sistema de cañería puede durar mucho tiempo, pero requiere mantenimiento para seguir fluyendo libremente y minimizar los problemas. Antes de que tenga grifos que gotean, tuberías rotas, inodoros obstruidos y problemas con el calentador de agua, hay algunas tareas sencillas que puede hacer para cuidar su plomería.

5 formas de mantener su sistema de  cañería

Evite los atascos.

Los atascos se forman por la acumulación de residuos, desechos y suciedad. Entender qué debe y qué no debe verter por los desagües es un buen comienzo para prevenir los atascos. Evite verter grasas, aceites y líquidos grasos por los desagües porque se solidifican al enfriarse y pueden dañar o atascar las tuberías. Si instalas rejillas en las aberturas de los desagües, podrás evitar que los restos de comida entren en los desagües de la cocina y que el pelo entre en las bañeras y duchas.

Limpia los desagües.

Si los desagües son lentos, puede ser un atasco inminente. Si limpias los desagües con regularidad, puedes ayudar a reducir la acumulación de residuos, suciedad y desechos. Aunque hay muchos limpiadores de drenaje que puedes conseguir en las tiendas, usarlos con demasiada frecuencia puede dañar tu sistema. Un limpiador casero seguro y sencillo es el vinagre blanco y el agua caliente. Añade bicarbonato de sodio por el desagüe de antemano para darle un impulso adicional. Desatascar el desagüe también puede ayudar a deshacer el atasco, pero si el atasco es persistente o grave, llama al plomero.

Mantenga su calentador de agua.

Su calentador de agua es una parte importante de su sistema y debería vaciarse al menos una vez al año para aumentar su eficiencia y vida útil. Compruebe el agua para verificar que no tiene escamas, óxido o una decoloración inusual. En el caso de los calentadores de gas, verifique que la llama del calentador de agua sea de color azul y si ve un color amarillo, haga arreglos para limpiar los chorros.

Busque fugas.

Realice una inspección periódica de sus tuberías para verificar que no tiene fugas. Compruebe visualmente todas las tuberías, mangueras y boquillas expuestas que estén conectadas a sus aparatos y accesorios de cañería. Inspeccione también las manillas de los grifos, las válvulas de las tuberías, los cabezales de las duchas, las tapas de los inodoros y los accesorios de las tuberías para asegurarse de que no tienen fugas. Abra los armarios para ver las tuberías debajo de los fregaderos. Inspeccione detrás y alrededor de la base del inodoro. Siga a lo largo de la pared y el techo por donde pasan las tuberías. La humedad, el agua, el moho, el óxido y las manchas son signos de una fuga. No olvide comprobar los grifos del exterior y verificar las fugas con una prueba del contador de agua.

Haz las reparaciones con prontitud.

Si tiene un inodoro que funciona o un grifo que gotea, no tarde en repararlo. Aunque parezcan problemas menores, pueden causar daños costosos a su cañería. También podría haber otros problemas subyacentes que podrían estar ejerciendo presión sobre su sistema y causando la fuga. Además, la actualización de sus instalaciones de plomería puede ayudarle a ahorrar dinero en sus facturas de servicios y a prolongar la vida útil de su sistema. Por ejemplo, los inodoros más nuevos que ahorran agua tiran de la cadena con facilidad y reducen los problemas de obstrucción.