Definidas de forma sencilla, los sistemas de tuberías son vías a través de las cuales los fluidos son contenidos y fluyen en un sistema. Los fluidos pueden ser agua, solución de glicol, líquido refrigerante, etc. Una red de tuberías, accesorios, juntas, válvulas y soportes se define como un sistema de tuberías.
En un proyecto típico puede haber varios sistemas que pueden dividirse por disciplinas, como las civiles (agua doméstica, aguas pluviales, aguas sanitarias, aguas industriales, aguas residuales, etc.); las mecánicas o de calefacción, ventilación y aire acondicionado (agua refrigerada, agua condensada, agua caliente, vapor, condensado, gas natural, fueloil, etc.); las de fontanería (agua fría doméstica, agua caliente, residuos, ventilación, etc.); y las de protección contra incendios (agua de rociadores, aire comprimido, etc.).
El diseño de los sistemas de tuberías depende de los requisitos y criterios de diseño específicos de cada disciplina.
Un diseño óptimo del sistema de tuberías es fundamental para el funcionamiento y la longevidad de toda la infraestructura y requiere un enfoque múltiple. Con un mantenimiento adecuado, se espera que las tuberías duren la edad del edificio, mientras que otros equipos se sustituyen al final de su vida útil. Dado que las tuberías abarcan múltiples disciplinas con distintos requisitos, desarrollar una directriz de diseño que lo abarque todo sería una tarea monumental.
Hay numerosos factores que deben tenerse en cuenta a la hora de seleccionar un sistema de tuberías, como por ejemplo
- Tipo de fluido.
- Presión del fluido.
- Temperatura del fluido.
- Caudal del fluido.
- Requisitos del código y de la autoridad competente.
- Vida útil.
- Coste del proyecto.
- Experiencia de la mano de obra local.
De qué materiales están hechos los sistemas de tuberías
Las tuberías pueden clasificarse en términos generales como de tipo metálico y de tipo no metálico. Las tuberías metálicas más utilizadas son las de acero al carbono, cobre y hierro dúctil. Las tuberías y accesorios metálicos se han utilizado durante mucho tiempo y siguen siendo muy utilizados.
Los tubos de acero fabricados de acuerdo con la especificación estándar se utilizan normalmente en la industria mecánica.
La presión de trabajo de la tubería de acero aumenta con su cédula. La norma ASME B31 identifica los criterios para calcular la presión de trabajo de los sistemas de acero. Los cálculos deben incluir la tolerancia del grosor de la pared, la tolerancia a la corrosión y la tolerancia al corte si se utilizan juntas roscadas o ranuradas. El manual ASHRAE Fundamentals Handbook es una excelente referencia y proporciona la presión de trabajo de los esquemas de tuberías de acero más utilizados, desde el tamaño nominal de la tubería hasta los de mayores dimensiones.
Los sistemas de tuberías de acero suelen unirse mediante accesorios soldados. Un buen ejemplo de estos son las bridas, roscados o con extremos ranurados. Es habitual contar con una solución híbrida, como el uso de accesorios roscados para los tubos de 2 pulgadas o menos y de accesorios con bridas para los tamaños de 2,5 pulgadas o más.? De esta manera se asegura una excelente unión de las cañerías para una mayor durabilidad y seguridad de los sistemas de tuberías.